Rejas de San Esteban - San Martín


Localización | La planta | El ábside | El interior | La galería | La portada

La iglesia de San Martín forma con la de San Ginés la pareja de iglesias románicas, ambas con galería, de que dispone la pequeña localidad de Rejas de San Esteban, Ayuntamiento agrupado al de San Esteban de Gormaz. La existencia de estos dos templos denota la importancia que debió poseer el lugar en el siglo XII, época en la que fueron construidos. Contrariamente a lo que le sucede a la iglesia de San Ginés, rehecha en su totalidad a excepción de la portada y la galería, la de San Martín se conserva mayoritariamente en su estado primitivo.

Consta el templo de una sola nave con presbiterio y ábside en la cabecera. Su fábrica es de tosca mampostería y se cubre con teja sobre armadura de madera a doble vertiente.
Fue declarada Monumento Nacional el 14-11-1980.

Localización


Coordenadas UTM (Datum ETRS89 y WGS84)
  • Huso:30T; X=478.000; Y=4.607.827
Cartografía

La planta


Iglesia de una sola nave sin división en tramos con cabecera formada por ábside en hemiciclo y presbiterio recto. En el muro meridional se abre la portada protegida por una galería porticada de doble acceso: por una escalinata que emboca en el extremo oriental y por un hueco rasgado en el centro de la arquería. Adosada a la cara norte del presbiterio se encuentra una estancia con funcionalidad de sacristía.

El ábside


Es de planta semicircular, en mampostería revocada igual a la del resto de la iglesia. Monta sobre un podio de amplia zarpa, también de mampostería. El alero se adorna en su frente mediante una hilera de bolas, y los modillones que lo soportan son de rollos, volutas o frutos bulbosos. El presbiterio es algo más ancho que el ábside, por lo que los muros de aquél están desplazados hacia afuera con respecto a los de éste; el resalte que produce esta diferencia se evidencia en forma de contrafuerte de sillería.
En posición axial se abre una ventana de aspillera bajo arco de medio punto que descansa sobre columnillas.
Forman el arco dos arquivoltas, la interior de baquetón trasdosado de una cenefa de bolas, y la otra de bolas de mayor diámetro. De los dos capiteles, el izquierdo representa la misma figura en ambas caras: un águila bicéfala de alas desplegadas y bello plumaje. El derecho muestra dos leones afrontados que, como es habitual, alzan las colas pasándolas por debajo del vientre al que parecen estar enroscadas.

El interior


Como ya se ha indicado, la única nave con que cuenta la iglesia está guarnecida con revoco liso en todos sus paramentos y se cubre a dos aguas con pares de madera y tablazón; recientemente se han zunchado y atirantado los muros para asegurar su estabilidad.
La cabecera es de sillería interiormente. El presbiterio se cubre con bóveda de medio cañón apuntado y el ábside con bóveda de horno también apuntada. En la embocadura se dispone un arco triunfal apuntado y doblado que apoya sobre dos columnas adosadas.
A cada lado del presbiterio existen dos arcos ciegos cuyos apoyos exteriores se efectúan sobre pilastras impostadas, y los interiores en una columna común de doble fuste y capitel de palmetas estriadas. Sobre ellos se coservan restos de las pinturas que debieron cubrir todo el zócalo de la cabecera y que representan escenas de la vida de San Martín de Tours.
Las dos columnas que soportan el arco triunfal van coronadas por capiteles casi idénticos decorados con palmetas acanaladas y tallos que se resuelven en volutas. Ábacos y cimacios forman un conjunto de molduras lisas con un filete de puntas de diamante que se prolongan por toda la cabecera formando una imposta en la base de las bóvedas.

La galería


Como casi siempre en la región, la galería se orienta al Sur. La forman siete arcos de medio punto de igual luz en su lado mayor (el meridional), de los que el del centro sirve de acceso. En el lado de levante se abre otro hueco rasgado hasta el suelo, también bajo arco de medio punto, que proporciona una segunda entrada al pórtico.

En contraste con la fábrica del templo, la de la galería es de sillares. Partiendo del eje del arco central hacia los extremos se suceden alternativamente columnas de fuste cuádruple o doble. Todas ellas soportan capiteles -cuádruples o dobles, según el caso- de sencilla ornamentación a base de hojas, palmetas y oros motivos vegetales. Ábacos y cimacios son lisos. El arco oriental no descansa sobre columnas sino sobre las jambas del hueco, mediando una imposta lisa. Todos los arcos se adornan, tanto por el interior como por el exterior, con chambrana de puntas de diamante.
Los ocho capiteles de la arquería pueden verse en la siguiente

 

La portada


Sobre el muro meridional, cuyo paramento guarnecido y pintado oculta la pobre mampostería de su fábrica, resalta un arimez de sillería, bastante estropeada en su parte inferior, que contiene la portada. La forman tres arquivoltas de medio punto, de las que la central apoya en columnas encapiteladas que se elevan sobre altos podios. La arquivolta interior es de flores de cuatro hojas inscritas en círculos tangentes entre sí; la central, de pequeñas bolas y grueso baquetón; la exterior consta de tres bandas, una de entrelazos, otra de bolas de mayor diámetro que las ya mencionadas, y la última de tacos jaqueses. Ocho modillones se alinean en lo alto para dar soporte a una cornisa inexistente; son de rollos, bolas y volutas.
Esta portada, por la disposición de sus arcos, jambas y columnas, y por la decoración del conjunto, si se exceptúan los capiteles, es prácticamente idéntica a la de San Ginés, debiéndose ambas seguramente a una misma cuadrilla de canteros que trabajó en el lugar.
El capitel izquierdo contiene la manida representación de dos leones de largas patas y peinadas melenas que unen sus cabezas hacia la arista del capitel mirando al frente con grandes ojos.
El capitel derecho presenta en la cara meridional una escena muy parecida a la vista en un capitel de la galería de San Ginés: Sansón, vestido con faldellín, desquijarando a un león. En la otra cara, un animal que parece ser otro león muerde en la pierna a un hombre que se encuentra tumbado.
En el muro norte existe una segunda portada muy sencilla de doble arquivolta, la interior de florones tetrapétalos inscritos en círculos y la exterior de baquetón trasdosado de filete de bolas. Los arcos apoyan sobre jambas sin capiteles, mediando una simple imposta lisa. Esta portada es también de sillería.
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